cuidado por quien votas

Que el elector chileno es ingenuo, no me cabe ninguna duda: por algo eligió continuar con un gobierno de un signo que lo ha tenido en ascuas durante tantos años, sin solucionarle las prioridades que él mismo define como sus principales (cesantía, salud, seguridad).
Que comulga con ruedas de carreta, también .
Que se traga cruditos algunos esloganes de turno, no cabe duda. Como, por ejemplo, que la derecha tiene toda la culpa de los problemas del país, siendo que no es ella, sino la Concertación, la que ha detentado el poder en los ultimos 16 años en Chile.
Pero esta actitud de ayer de la presidenta Bachelet, al proclamar cumplidas sus 36 medidas prometidas para los primeros 100 días de gobierno, muchas a medio vestirse por ser condescendiente, me parece una burla y un desprecio demasiado provocador al nivel intelectual del chileno.
¿Creerá nuestra gobernante, que alguien con dos dedos de frente, podrá aceptar que sus medidas prometidas y anunciadas, están realmente implementadas y que está es una misión cumplida, como dijo?
¿creerá que basta con este apresurada sesión de gabinete que funciona al igual que un escolar que no ha estudiado y que "calienta" la materia sólo minutos antes de entrar a dar la prueba, para convencernos de que hay un trabajo serio detrás de esta "misión cumplida" que ha auto proclamado?
¿Tan en menos mira la capacidad intelectual del chileno para pretender que le creamos que, si hace un par de semanas llevaba cumplidas un 20% de las medidas prometidas, ahora, con una eficiencia digna de San Expedito, ya las ha completado a toda velocidad y debemos reconocer su eficiencia de un gobierno tan cuestionado como éste?
¿Creerá que no olvidamos las inauguraciones apresuradas y preelectorales de Lagos, que al poco tiempo se han ido derrumbando como gigantes con pies de barro, demostrando una improvisación y una burla de antología: pavimentación de la Alameda, casas a medio terminar a los ex-habitantes de campamentos, ferrocarriles al Sur, asignaciones del Crédito Universitario, Ley de Responsabilidad Juvenil, etc, etc?
¿Nos habrán visto la cara o algo más las autoridades, o creen que ya no es necesario ni siquiera esforzarse en disimular ante los ojos de la opinión pública, los absurdos más evidentes de sus procedimientos?
En todo caso, su tranquilidad tiene alguna base. No olvidemos que cuando asumió como Ministra de Salud de Ricardo Lagos, en el 2000, prometió terminar con las colas de los consultorios en 3 meses, o de lo contrario renunciar, y no hizo ni lo uno ni lo otro. Y nadie dijo nada, y más encima resultó electa presidenta. ¿A alguien en Chile le importa que le tomen el pelo?
En todo caso, sin ser pitoniso, el 28 de diciembre pasado escribí un post llamado: "Broma del día de inocentes: 36 compromisos de Bachelet". Leánlo, y verán que también en eso le acerté. El problema es que muchos aceptan tranquilamente como se rien en su cara, y nadie dice siquiera : exijo una explicación.