Monday, August 11, 2008

 

A 22 AÑOS DE CARRIZAL BAJO:

LAS VICTIMAS DEL TERRORISMO DE IZQUIERDA
DE LAS QUE NADIE HABLA : LOS NIÑOS



Un listado, incluso incompleto, de las víctimas civiles y militares de la violencia terrorista de izquierda en Chile entre 1980 y 1990, todas identificadas por su nombre y apellido, fecha de su muerte o lesiones, circunstancias en las que éstas ocurrieron, podemos leerla en el libro "La Verdad Olvidada del Terrorismo en Chile: 1968-1996", con una completa y exhaustiva recopilación de hechos y concienzudamente editado por el Cuerpo de Generales (R) del Ejército (Editorial Mayé, Santiago, noviembre 2007)
Es conmovedora su lectura, tanto por la frecuencia de los atentados, la enorme cifra de personas inocentes víctimas de estas acciones del terrorismo de izquierda, lo dramático de las circunstancias involucradas, asi como el silencio y la absoluta falta de justicia que siguió a éstas y la absoluta impunidad en las que muchos de sus responsables han quedado a través de los años. Es lógico suponer que un gran número de los causantes de muertes, graves heridas y secuelas físicas y sicológicas llevadas a cabo con evidente dolo de causar daño , circulan libremente por las calles, trabajan normalmente entremezclados con la gente común, e incluso tal vez reciban jugosas indemnizaciones del Estado, las mismas que nunca recibieron sus inocentes víctimas.
Al leer estas páginas, conmueve la injusticia y el sufrimiento que encierra cada una de estas fechas y acontecimientos, asi como el olvido en que estas personas han quedado sepultadas, debiendo superar con sus propios medios y sin siquiera escuchar de parte de los actuales gobernantes una crítica pública social a sus victimarios y a los instigadores intelectuales de estas acciones. Pareciera que su sufrimiento no tiene importancia ni cabida para quienes, de alguna u otra forma, aplaudían, promovían o justificaban estas acciones violentistas que culminaron con estas, para ellos, vidas desechables o "daños colaterales".
A partir de esta lista podemos desprender las siguientes cifras:

Entre 1980 y 1990 se registraron las siguientes cifras de víctimas:

53 civiles muertos, victimas de atentados explosivos o asesinatos de grupos terroristas
70 Carabineros asesinados
14 miembros del Ejército asesinados
3 miembros de la Armada asesinados

270 civiles gravemente heridos por acciones terroristas de izquierda
138 Carabineros gravemente heridos
23 miembros del Ejército
3 miembros de la Armada
2 miembros de la Fuerza Aérea

El detalle detrás de esta lista es impactante y deprimente, cruel. Gran cantidad de las víctimas eran personas que iban circulando por la calle adonde se había colocado una bomba destinada a explotar indiscriminadamente contra el que fuera pasando; RPG lanzados contra casas cercanas a Comisarías; baleos e incendios intencionales contra conductores y pasajeros de buses; y hechos de una maldad incomprensible, como colocar artefactos explosivos en la sala de espera de un consultorio médico (Capredena, Valparaíso, 20 enero 1988) o en el interior de bancos u oficinas municipales en horas de trabajo.
Aqui no hay personas desfilando con fotos de sus deudos o heridos clamando ¿dónde están?
¿Donde están los culpables?
¿A quién le sirvió todo este dolor oficialmente olvidado e ignorado ?

Publicar aqui la lista completa de atentados terroristas y sus víctimas resultaría demasiado extenso, agotador de escribir y de leer, por lo cual en caso de desear conocer el detalle , lo más apropiado sería recurrir a las fuentes, como la publicación antes mencionada.
Pero me limitaré a transcribir sólo un aspecto especifico del listado, más breve pero a la vez intensamente injusto: las víctimas infantiles de la acción indiscriminada e impune del terrorismo de izquierda en Chile entre 1980 y 1990:

24/3/80 una bomba colocada por terroristas del MIR en Av. Recoleta esquina Subiabre de Conchalí, Santiago, cerca de la Tenencia de Carabineros local, causa la muerte de José Sáez Pérez, de 11 años, y heridas graves a Karina Ferrada Carrasco (9) y a Erika Sáez Pérez (8)

25/4/80 una bomba colocada por terroristas del MIR cerca del estacionamiento de Industrias Lever en Santiago, Carrascal 3551, deja gravemente mutilado a Luis Albornoz Gálvez, de 13 años

23/8/80 Luis Amador Vargas Vargas, 14 años, gravemente herido mientras caminaba frente a una sucursal del Banco Sudamericano, en Santiago, donde explotó una bomba

28/4/84 herida en San Miguel la niña Carolina Díaz, por una balacera en una protesta en la que unos 15 sujetos de las Milicias Rodriguistas atacan e incendian la Sede de la Unidad Vecinal n° 58, San Miguel, con 9 personas en su interior.

14/5/84 FPMR coloca una bomba frente a la calle Paula Jaraquemada N° 7911,en Pudahuel, barrio popular de Santiago, a raiz de la cual recibe gravisimas heridas César Flores Sanhueza, de 11 años

19/12/84 El FPMR coloca una bomba en un poste eléctrico ubicado en calle Colón con General Cruz, Valparaiso, resultando gravemente herido, entre otras personas, Eduardo Gárate Donoso, de 11 meses, herido en brazos de su madre

6/3/85 Gerardo Grandón Oñate (14 años) resulta herido por una bomba colocada en calle Cousiño de Lota, frente al Banco del Estado. Esto, a tres días del gran terremoto de la zona Central.

9/1/86 Una bomba colocada en una calle de Valparaiso hiere gravemente a Rodrigo Nanjarí (12) y a Ximena Nanjarí (8), hermanos.

26/3/86 una bomba incendiaria lanzada contra un microbus de recorrido en Santiago causa quemaduras y heridas a Rosario Navarro Rojas, de 2 años.

5/11/86 una bomba incendiaria lanzada al interior de un microbus en Viña, causa quemaduras graves a tres pasajeras, una de las cuales, que cursaba un embarazo, muere un mes después, llevándose además la vida de su hijo in utero.

24/2/87 en Concepción, una bomba explota en una calle, hiriendo gravemente a William Espinoza Araví, de 15 años.




¿Cuántos de los asesinos de estos niños han pagado por su delito?
¿Qué indemnización han recibido los familiares de estas victimas inocentes, para paliar al menos en algo su dolor?
¿Por qué estos familiares han guardado tanto silencio, dificultando que se les haga justicia?
¿Cuántos de estos terroristas, algunos nunca identificados, hoy tal vez ocupan cargos o reciben indemnizaciones estatales al considerárseles "victimas de la represión" y valorizarseles al máximo sus propios "derechos humanos", los mismos que ellos no tuvieron ninguna duda en pasar a llevar en la persona de estos niños, o de quien tuviera la mala suerte de pasar por ahi?
¿Cuántos de estos terroristas fueron defendidos con bravura por la Vicaría de la Solidaridad u otros organismos eclesiásticos a quienes poco o nada les importó el grave daño, evitable y cruel, que causaron a estas personas, burlándose asi la Iglesia de los familiares de estas victimas?
¿Cuantos de estos asesinos están arrepentidos?
¿Cuántos de ellos tal vez trabajan ahora junto a los familiares de sus victimas, sin éstos últimos saberlo?
¿Cuántos de estos responsables de tanto dolor habrán muerto por acción de los organismos de seguridad del Gobierno Militar y hoy son llorados como victimas inocentes en vez de victimarios crueles?
Dificil saberlo. Más aun si los familiares de las victimas han perdonado y olvidado, actitud muy cristiana, pero a la vez muy egoista, porque impide que muchos conozcan su verdad, se den cuenta de la verdadera cara de quienes hoy claman por el "Fin de la exclusión" despertando las simpatías de algunos ingenuos , pudiendo evitar de este modo que en el futuro, otros tengan que pasar, POR IGNORANCIA, por lo que ellos tristemente tuvieron que pasar.

Son estas victimas cuasi anónimas aquellas de quienes "un gran defensor de los Derechos Humanos", como se definió por parte de los medios al recién fallecido Juan Bustos, ni siquiera se molestó en reivindicar en cuanto a sus derechos humanos vulnerados por la izquierda.

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Comments:
Este tipo de verdades hay que repetirlas hasta después del cansancio para compensar al menos la verdad oficial, que ha sido promovida incluso por nuestro sector.
 
Estoy de acuerdo con Francisco.
Repetir una y otra vez, hasta que caigan los Muros de Jérico.
 
De nuevo un gran acierto por tu parte, también me llevaré este post a mi Facebook para masificar su lectura, es muy importante difundirlo.
Recuerdo por aquellos años que no había día que no hubiera atentados terroristas con víctimas inocentes en manos del MIR y otros grupos subversivos.
Saludos.
 
Saludos, Cristian, te puse un link,muy bueno!
 
Cristián, te dejo aquí un comentario que me dejó una amiga en mi Facebook respecto a tu post :

Rosabella Liniers Pentenero ha escrito:
ayer a las 12:10
Siento un gran orgullo de haber sido partícipe del libro"La verdad oculta del terrorismo en Chile" fue un trabajo hecho entre "varios" con mucha dedicación y responsabilidad, es lo que leerán nuestros hijos, nietos, sobrinos, siempre y cuando nosotros empezemos de una vez por todas a contarles lo que realmente pasó en este país, no demos espacio al miedo, el temor es del diablo, nosotros somos de Dios, con el Señor no hay temor. Debe haber un reconocimiento a nuestros uniformados que entregaron sus vidas por salvar a este país, el gobierno militar es un orgullo, levantaron a esta nación que estaba sumergida en un caos, verguenza de qué podemos sentir, de que hayan muerto las blancas palomas disfrazadas de blanco, cuando en el fondo tenían negras almas, convencidos de que las armas eran la gran forma de llegar al poder y terminar y aniquilar a sus hermanos, incluso a través del estómago como lo hacían con las tarjetas JAP.
 
Cristian :

Para la izquierda la vida de un terrorista vale mas que la de un
niño.

Saludos.
 
Gracias a los pocos y fieles comentaristas respecto a sus opiniones acerca de estos lamentables hechos ocurridos y convenientemente olvidados en nuestra historia reciente.
Este libro se encuentra, como siempre en estos casos, disponible en unas muy pocas librerías, tales como la Antártica y la Feria Chilena del Libro. Es un gran esfuerzo documental.
El gran defecto de los familiares de estas victimas ha sido el quedarse callados y resignados. Cuando uno no denuncia lo que le pasó, permite que mucha otra gente subsista en la ignorancia y no tenga la oportunidad de evitar que se mantengan o repitan las condiciones que permitieron que dicha tragedia ocurriera.
 
Nada que decir, con tu post lo has dicho todo.
me pregunto si alguna vez en el senado un grupo de personas con carteles con fotos de las victimas del mir del fpmr y otros grupos subversivos se pasearan en frente de los diputados y senadores de izquierda, que dirían sobre ellos, lo mas probable es que ni siquiera llegarían a pisar el senado la gente con esos carteles, porque les aplicarían una censura y la ley de seguridad del estado.
La última por mostrarle cosas a la gente que a la izquierda le parece que no debe escuchar ni oír.
 
Eso es lo malo, Cristián, guardar silencio y no exigir justicia como corresponde, sin embargo, la justicia ha sido para los terroristas.
 
ME GUSTARIA CONOCER OPINIONES AL RESPECTO, DE (CRONOLOGICAMENTE)DE EL EX COMANDANTE IZURIETA CAFARENA, DE JUAN CHEIRE, DEL ACTUAL IZURIETA FERRER.
HABRAN TENIDO CONOCIMIENTO , LO TENDRAN O SERA UN M UNDO AJENO AL NUESTRO.SERA PARA ELLOS UNO DE BILZ Y PAP. DIMENCION DESCONOCIDA DE ELLOS O DE NOSOTROS.
 
Queridos amigos, me parece realmente lamentable las tragedias y las víctimas inocentes de los atentados terroristas así como también aquellas personas inocentes que murieron ejecutados y torturados por el régimen militar. Es imposible llegar a una objetividad cierta en estas lides pero me parece que la altura de miras puede estar sustentada en base al entendimiento e internalización de la idea de que todo lo que ocurrió en esa época estuvo marcado por un contexto político que se dio en ese momento, con sus altos y bajos, pero propio de ese momento, en que además el mundo estaba fuertemente dividido. Tal como hoy se juzgan militares asesinos se deben juzgar terroristas asesinos, comparto esa idea porque luego del desorden viene siempre el orden e históricamente el juicio (podemos verlo en todos los pasajes de la historia universal) y esto se debe a que siempre un momento histórico lleva a otro y ese a otro y ese a otro... y si no entendemos ese contexto enorme, que implica años de historia es imposible entenderlo fragmentado y menos podemos juzgarlo.

Saludos,
 
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