cuidado por quien votas

El candidato de la derecha, Sebastián Piñera, alcanzó el 44% de los votos , superando por 14 puntos al socialista Eduardo Frei (29%), y colocándose prácticamente a un soplo de la victoria final en la segunda vuelta del próximo 17 de enero.

La UDI, partido principal de la Coalición por el Cambio de Piñera, se consolidó como el principal partido político de Chile, con el 25% de la votación total. Si bien desde hace años la UDI se ha constituído en el primer partido politico de Chile, aquél con mayor adhesión popular votación tras votación, esta vez subió su porcentaje. Uno de cada cuatro chilenos votó por sus candidatos.

Renovación Nacional (RN) , el segundo partido de la Coalición, resulta ser también el segundo partido más votado por los chilenos, con el 16% de la votación general para sus candidatos.

La Cámara de Diputados registra, por vez primera desde 1990, una mayoria de derecha, con ambos partidos UDI y RN e independentes asociados a ellos.

Lo único lamentable fue el regreso al Congreso de 3 parlamentarios comunistas, de cuyo pasado terrorista nunca han hecho un mea culpa, llegando al Congreso entre ellos Guillermo Teillier, el autor intelectual de la masiva internación de armas de guerra por Carrizal Bajo (1986), oportunamente descubierta antes de que alcanzaran a ser distribuidas para generar una guerra civil en Chile, y quien apoyó activamente el fallido magnicidio al Presidente Pinochet también en 1986 y que costó la vida a 5 de sus escoltas; admirador, además, del guerrillero genocida y fundador de las FARC, Manuel Marulanda, ante cuyo fallecimiento declaró que la muerte de este asesino "constituye una gran pérdida para el movimiento revolucionario". En fin, son los riesgos de la democracia.

Lo principal es que el sector político que un 49% de los chilenos prefería para que nos gobernara en la elección de 2000 y un 46% de los chilenos en la de 2005, y que entonces casi la mitad de los chilenos han debido tolerar 10 años gobiernos que no deseaban y que, con sus desaciertos, perjudicaron a la mayoría de los chilenos, hoy está muy cerca, con una ventaja irremontable, de transformarse en realidad, en una alternancia que le hace muy bien a la democracia.

Ya muy pocos creen y quieren a la Concertación socialista, cuya única gran propuesta es hoy tan miserable y pequeña como "unámosnos y derrotemos a la Derecha" en lugar de derrotar a la pobreza, la delincuencia y la cesantía, a los problemas que afectan a la gente, y no es extraño que frente a esto el clamor de las urnas en pro de la Derecha sea arrollador e incuestionable.
El mensaje es claro:

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