cuidado por quien votas

Imagen de un post de este blog, de hace
exactamente 2 años ¿don profético?
No, sólo sentido común.

Hoy dia 11 de marzo los chilenos conmemoramos dos años del inicio de las consecuencias de la más grave torpeza electoral cometida en los últimos años de la historia de nuestro pais. En esa fecha, producto de intervenciones electorales que recién están saliendo a la luz, y de engaños repetidos desde hace décadas por los socialistas (sloganes cazabobos), se inició este 4° gobierno concertacionista, sin duda el peor de los cuatro, que ha logrado tener sumido al pais en una serie de desaciertos, problemas evitables y hechos de corrupción que han terminado afectando directamente a la mayoría de sus habitantes. Pese a asumir en las mejores condiciones económicas posibles, tanto a nivel nacional (altisimo precio del cobre, industrias exportadoras pujantes, grandes reservas fiscales) como internacional, al cabo de dos años nos vemos sumidos en el producto de un crecimiento bajo, una clase media empobrecida, agitación social absolutamente artificial y manejada por la extrema izquierda, delincuencia cada vez más osada y diversificada, mala calidad de vida y una reforma judicial que sólo ha favorecido a los delincuentes por sobre las victimas.
Los yerros, ineficiencias y hechos de corrupción de estos últimos dos años, en continuidad lineal y de responsabilidad con el gobierno anterior de Lagos, suman y siguen. Su estandarte más visible es el Transantiago, por la magnitud del desacierto, su improvisación y repercusión en la vida diaria de 5 millones de chilenos, hasta el dia de hoy. Pero no es ni con mucho el único, y si nos concentramos demasiado en el, corremos el riesgo de que un árbol (el Transantiago) no nos deje ver el bosque (el cúmulo de otros errores de la Concertación).
Los errores han continuado en todos los campos . Corrupción (caso Chiledeportes, EFE, Subvenciones del Ministerio de Educación ), reformas mal implementadas (incapacidad del AUGE para asegurar atenciones garantizadas, reforma educacional mal orientada que busca nivelar hacia abajo y obsesionada erróneamente con el lucro, motor de una mejor iniciativa; Tribunales de Familia sobrepasados, desastres y graves descriterios de la Reforma Penal que sólo favorecen a los delincuentes, graves fallas de implementación en el SENAME frente a la Reforma Penal juvenil), alteraciones en el orden publico (manifestaciones violentas con vandalismo de los que nadie, efectivamente, responde; apoyo tácito a manifestaciones violentas, dirigidas por comunistas, contra las salmoneras, contratistas de Codelco, quemas por parte de terroristas mapuches de casas, bosques y camiones), delincuencia floreciente y cada vez más osada (con nuevos delitos como secuestros incluidos, y varios carabineros asesinados sin miedo), venganza politica (indultos a terroristas e inflexibilidad con militares perseguidos casi como caza de brujas), crisis valórica (presiones para imponer la pildora del dia después, destrucción del respeto familiar), improvisación ante la crisis energética que nos tiene con riesgos de cortes y racionamientos electricos y de gas nunca antes vistos, propios de un tiempo de guerra, etc etc. Un buen resumen de este último año de Bachelet, que me ahorra la necesidad de escribir un largo post, lo pueden hallar nuevamente en el blog de Sebastián Miranda.
Tal como muy bien definió Allamand en una entrevista publicada en La Tercera del 2 de marzo, "El segundo tiempo de Bachelet será el derrumbe de la Concertación. (...) Al inicio de este segundo tiempo se ha producido un verdadero desfondamiento de todas las bases a partir de las cuales se estructuró el gobierno de Bachelet. Partió con un gobierno ciudadano que desapareció con la crisis pinguina, con la promesa de que nadie se repetiría el plato, que se administraría lo que supuestamente era la valiosa herencia del gobierno de Lagos, que se administraría un promisorio horizonte económico, que se harían valer las mayorías parlamentarias en ambas cámaras. Los cinco principios hoy se han evaporado".
Y ahora vemos en las encuestas al candidato perdedor del 2006 (con un 46% de votación en su momento, eso sí), Sebastián Piñera, encabezando indiscutiblemente y a gran distancia las encuestas presidenciales. ¿Por qué ahora, si hace dos años debiera haber sido elegido y asi nos hubiéramos ahorrado tantas penurias, desaciertos y despilfarros ocurridos en estos primeros dos años de gobierno de Bachelet? Habían innumerables fundamentos y razones sólidas detalladas en este mismo blog , para que asi hubiera sido, si el chileno, de una buena vez, tuviera cuidado por quien vota. Si de una buena vez se decidiera a votar con la cabeza.


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